Durante la cuarentena por coronavirus, el home office y otras formas de teletrabajo has puesto de relieve la importancia de los líderes de equipos.
Existen técnicas que se pueden aplicar para obtener resultados superadores. La clave está en que el líder debe poner foco en resultados y tareas a alcanzar pero sobre todo en la gestión emocional de los miembros del equipo. No alcanza con hacer reuniones a través de videollamadas todos los días, sino que también es necesario hacer un seguimiento de acuerdos operativos claros y dinámicas para lograr distender al equipo en estas condiciones de aislamiento.
Transformación del líder en un coach motivacional
En este contexto de home office, que para muchos es una práctica nueva, el trabajo es tan importante como también lo es mantener una alta motivación y moral de cada colaborador. El líder debe asumir el rol de coach, tratando de estimular al grupo y a los individuos para conseguir resultados, impulsarlos a atravesar dificultades que puedan presentarse y ayudarlos a hacer cambios positivos para que todos salgan fortalecidos.
La motivación del equipo está basada en el logro individual y en el del conjunto. Hay motivaciones extrínsecas e intrínsecas. La primera depende de la disposición a colaborar y de la energía de superación de cada uno. La segunda, depende del líder en su rol de coach que es el que transmite, guía, acompaña y orienta. El clave que el líder inspire confianza, debe proporcionar incentivos emocionales.
Si el líder no confía en sus capacidades, autoliderandose, podrá tener a cargo un grupo de personas y hacerlas alcanzar los objetivos. El contexto demanda un líder coach cercano, que inspire confianza y genere adhesión. El líder con influencia, tiene la capacidad de ser generador de otros líderes, haciendo surgir lo mejor de cada talento y ayudando a que confluyan en un entorno colaborativo donde todos se sientan partícipes.
¿Cómo ser un líder motivacional?
1- Evalúa tu estado motivacional a diario
Al iniciar y finalizar la jornada laboral tenés que evaluar tu estado interno. Compartí tus experiencias con tus colaboradores. ¿Qué emociones sentís durante el día? ¿Qué problemas ocupan tu mente? ¿Cuál es tu índice de preocupación?
2- Evalúa el estado emocional de cada colaborador
Lo mejor que puede hacer el líder es colocarse en la posición de escucha. Prestar atención a lo que expresan los colaboradores y a su lenguaje corporal. Una escucha sin prejuicios, que sea neutra y presente.
Eso te dará información de quienes están en un mejor estado emocional y de quienes necesitan más apoyo de tu parte.
3- Generar pausas recreativas
La idea es que cada colaborador establezca un mecanismo de pausas activas. Interrumpir tareas y dedicarse media hora a descansar. También se puede organizar un after office, un momento para compartir tomando una bebida y charlar de temas que no tienen que ver con el trabajo como una manera de distensión.
4- Proponer un desafío semanal o mensual
Armar un proyecto puede ser estimulante. Brindar la metodología, el horario y las herramientas para llevar adelante dichas tareas y la forma en que los ayudarás a concretarlo. Lo importante es el proceso.
5- Desayunos o almuerzos
Preparar un tema específico para exponer y que se comparta entre los compañeros de trabajo. Puede ser de manera quincenal o mensual para no sobrecargar.
6- Libertad de acción
Brindar libertad de acción a los colaboradores, es importante que estimules su autonomía, el pensamiento lateral y la resolución de problemas que servirá para construir un autoliderazgo.
7- Elegír a un “buddy”
Optar por un compañero compinche, que será esa persona de apoyo durante el trabajo a la distancia. Será el soporte, apoyo, inspiración y motivación.
8- Interacciones virtuales
La idea es generar juegos virtuales, trivias e infografías o cualquier otra iniciativa que permita mantener una interacción lúdica y que ayude al equipo.
El rol del líder motivacional en tiempos de home office por coronavirus requiere de creatividad y humanidad.